(Comunicado de prensa PDF)
Para Christian Hündgen resulta obvio: cuantas más materias primas secundarias se puedan reincorporar a la fabricación de productos, mejor. Por ese motivo la empresa familiar se ha centrado en lograr la máxima pureza posible al suministrar materiales reciclables utilizando la separación. «Dirigimos nuestro interés más bien hacia la separación por profundidad que hacia una elevada productividad. Así resultamos interesantes para los clientes de nuestra zona», señala el Gerente.
Para lograr esta meta, Christian Hündgen y Sascha Haag, Gerentes de ventas de STEINERT, especialista en separación mediante imanes y mediante sensores, han analizado detenidamente los otros materiales residuales procedentes de envases ligeros (EELL) derivados de la separación de plásticos. Cuando no se pueden evitar residuos, entonces el reciclaje de los materiales, es decir, el reintegro en el proceso productivo, es lo mejor que se puede hacer. Si un material no se puede tratar, entonces solo queda la opción del aprovechamiento energético, es decir, la incineración. Los residuos para separar provienen del contenedor amarillo y hasta ahora se habían destinado a la fabricación de combustibles alternativos con un alto poder calorífico (EBS) para el aprovechamiento térmico. Había que responder a la pregunta de qué otras etapas de separación permitían excavar otros materiales reciclables para poder aprovecharlos para la valorización de materiales.
Un tema que en STEINERT también tratamos habitualmente es el aumento de las tasas de reciclaje de los clientes y la reducción de costes. En STEINERT nos planteamos la tarea de separar plásticos negros de forma rentable, ya que ésta es una cuestión que preocupa al sector de gestión de residuos hace tiempo.
En una primera etapa, la mercancía a separar de la empresa Hündgen se examinó en el Centro de pruebas de Colonia para comprobar qué plásticos de valor se pueden recuperar de los residuos de envases ligeros. El sistema de separación UniSort Black convenció a Hündgen. Extrae todos los plásticos negros del flujo de materiales. Son plásticos que sin ese sistema se perderían. Además, se descargan los plásticos que presentan un espectro especificable NIR (por ejemplo PE, PP, PS). «Nos convencieron los ensayos en el Centro de pruebas y fueron una garantía para tomar la decisión de comprar», subraya Hündgen. «Las condiciones del ensayo se llevaron a cabo reflejando las existentes en la planta con absoluta fidelidad. Eso nos facilitó la decisión. A todo ello se añade la opción de un mantenimiento a distancia, que permite una rápida ayuda en caso de adaptaciones». Esto es un factor importante para una empresa familiar que procesa unas 200 toneladas al día.
Empresa familiar y líder en tecnología
El hecho de que la empresa familiar haya optado por UniSort Black es una consecuencia lógica. Si contemplamos la historia de la empresa, se comprueba que el liderazgo tecnológico y el conocimiento de los mercados están firmemente arraigados: con la implementación del denominado «Punto Verde» a principios de los años noventa, Hündgen se convirtió en una precursora en materia de economía circular, al reintroducir las materias primas utilizadas a través del ciclo de vida de la mercancía de nuevo e íntegramente en el proceso productivo. «No esperamos que se promulgue una ley para reaccionar, sino que estamos actuando en los preámbulos y preparados para los cambios»: así resume Christian Hündgen la evolución de la empresa. «Mediante nuestras actividades en asociaciones y nuestra cooperación con universidades, así como colaborando en proyectos con institutos de investigación, lo que queremos es informarnos con antelación sobre los futuros avances y formar parte de ellos».
En la actualidad, la empresa mediana cuenta con una plantilla de 120 trabajadores. Desde que en 1949 Anna y Peter Hündgen fundaran la empresa de transportes, la compañía se ha ido adaptando constantemente a las necesidades del mercado y evolucionando en consonancia. Al principio como empresa de reabastecimiento durante la II Guerra Mundial; más tarde como entidad explotadora de canteras. Cuando estas se transformaron en vertederos, la familia Hündgen volvió a adaptarse a los cambios de las necesidades del mercado y se dedicó a la gestión de residuos.
Alrededor de 140 camiones llegan a la sede en la calle Peterstraße. Durante todo el año, los residuos se dividen en unas 52.000 tn/año procedentes de envases ligeros (EELL) y unas 30.000 tn/año son residuos comerciales. En Hündgen se producen 50.000 tn/año de combustible alternativo. Otras prestaciones de servicios que también llevamos a cabo son el prensado de plásticos films, papel, plásticos o la recepción de madera, restos de poda, limpieza viaria y residuos de construcción y demolición. Para eso se emplea el servicio de contenedores ubicado en las instalaciones empresariales con una flota de más de 20 vehículos.
Reducir los costes de incineración, aumentar las tasas de reciclaje y la seguridad contractual
Durante el tratamiento para una valorización de los materiales, en Hündgen se efectúa una separación en función de las granulometrías: la fracción de mercancía a separar de 60-200 mm de tamaño es la que tiene la máxima intensidad de separación por profundidad. Atraviesa diferentes etapas. El proceso se compone de fases con imanes tipo overband, separadores por corrientes de Foucault STEINERT NES y separadores STEINERT NIR. Hasta hace poco, el proceso finalizaba aquí y los residuos se enviaban como combustible alternativo para el aprovechamiento térmico, p. ej., a fábricas de cemento. Después de los ensayos con UniSort Black se ha añadido otra fase de separación. «Con UniSort Black no solo hemos podido flexibilizar la oferta para los clientes, sino que al mismo tiempo podemos aseverar cuotas superiores de separación ante el sistema dual». De esta forma, se aumentó el índice de rendimiento de los plásticos procedentes de la fracción resto y los materiales reciclables se pueden reintegrar al ciclo y utilizarse para una valorización. «Además, podemos conseguir más fácilmente las cuotas de separación acordadas por contracto; ahorramos costes de incineración y, lo que no es menos importante: tenemos la posibilidad de extraer poliolefinas (PO) en forma de envases de PE y PP y lograr así de nuevo el valor añadido del material reciclable», afirma Christian Hündgen.